El sexo resulta ser un dulce que gusta a todos, me atrevería a decir que en estos tiempos incluso cada vez a chicas y chicos más jóvenes, lo que ocurre es que por mucho que nos quieran enseñar que el sexo es bueno, necesario y que forma parte de nuestra vida, debemos saber que del mismo modo nos puede dar quebraderos de cabeza, ya que las enfermedades de transmisión sexual y los embarazos no deseados están a la orden del día y es esencial tener una buena información para evitar que nos duela la cabeza. Tengo la sensación que por más charlas que nos dan, por más consejos que recibimos de nuestros mayores incluso de personas afectadas que nos quieren poner en preaviso, menos nos enteramos de lo que de verdad puede pasar, parece que hasta que no nos ocurre en propias carnes no nos damos cuenta del peligro que conlleva tener sexo sin las debidas precauciones. Para prueba como suelen decir un botón no hay más que ver las noticias y las redes sociales para darnos cuenta de que cada día la juventud es mucho más aventurera, se atreven con todo y al final los resultados caen por sí solos.
Las relaciones sexuales pueden ser todo lo bonitas que nosotros queramos, quien no ha soñado siempre con su príncipe o princesa con lo bonito que sería el primer beso, y que todo sería como en un cuento de hadas. Aunque es verdad que todo es ciencia ficción cabe decir que tener una relación bonita no es complicado tan solo hay que creérselo y cuidar y hacer que así sea, solo que debemos tener en cuenta un pequeño detalle, cuidarnos es de vital importancia y para ello debemos tomar las siguientes precauciones. Por supuesto ante relaciones nuevas o esporádicas, debemos tener siempre a mano un preservativo, es el único anticonceptivo de doble barrera que evitará no solo que podamos coger cualquier tipo de enfermedad sino que además nos ahorrará el tener que estar detrás de las pastillas del dia despues para poder evitar con ellas poder quedar embarazadas.
Y si tenemos una pareja estable y eso de agrandar la familia no va con nosotros o simplemente no es el momento, es tan sencillo como acudir a nuestro ginecólogo y pedirle que nos aconseje sobre un anticonceptivo que nos resulte eficaz, solo de esta manera podremos disfrutar de las relaciones sexuales como Dios manda.